LEYENDA DE JOAQUÍN CEDANO MUERTES ANUNCIADAS PARTE 2

Joaquín Cedano mata al Sr. Polín Bonilla de Barranca de Otates.

ANTCEDENTES DEL CRIMEN.

Después de que Joaquín mató a su primo Melitón, se anduvo unos días allí en Santa Clara, los hermanos de Melitón le tenían coraje (lógico) pero no se animaban a confrontarlo de frente la verdad le tenían miedo. Joaquín estuvo pensando algunos días que iba  hacer para no seguir provocando a sus primos, ya que ni siquiera Fernando Basulto que era el Presidente Municipal y enemigo de Joaquín trataba de buscarlo,  se hacía de la vista gorda como que no pasaba nada. Joaquín tenía muchos amigos en las tres Barrancas que lo apreciaban y lo querían mucho entre ellos estaba el Señor Ismael Preciado también del Barrio de Arriba quien además era su compadre de grado. 

Un día por  la noche Joaquín y su esposa Andrea fueron  a visitar a su compadre  Ismael y esposa, con el propósito de invitarlo a  que se fueran  los dos a los Estados Unidos, y así tratar de que se les olvidara por un tiempo el crimen que había cometido con su primo Melitón. Ismael y su esposa estuvieron de acuerdo  a que se fueran juntos; entonces Joaquín preparó el viaje. Joaquín era muy astuto y en todo pensaba, recordemos que había cabalgado con Pancho Villa.  En esta ocasión para no crear sospechas de que se iban a ir y darles a los hermanos de  Melitón  oportunidad de que lo atacaran le dijo a Ismael: “pues compadre, entonces vámonos de una vez hasta Guadalajara y de allí se regresa usted Con Polín Bonilla para que nos preste dinero a los dos para el viaje” Polín Bonilla  se dedicaba a prestar dinero, además Joaquín lo consideraba su amigo. Así lo hicieron, cuando llegaron a Guadalajara, se hospedaron en un mesón y de allí se regresó Ismael hasta la Barranca de Otates a pedir el dinero que  ocupaban. El Sr. Polín no les prestó el dinero pero en las pláticas que tuvo con Ismael, Don Polín logró averiguar y sacarle a Ismael el lugar donde se hospedaba Joaquín, entonces Polín ya con la información precisa y con la intención de quedar bien con los hermanos Solórzano, inmediatamente le mandó avisar a Hermilo Solórzano, con el Sr. Francisco González, que Ismael y Joaquín iban a huir a los Estados Unidos, y que ya sabía en donde estaba hospedado Joaquín. Cuando supo Hermilo esta noticia alcanzó a Ismael y junto con sus Hermanos y más elementos de policía después de una  “calentadita” lo obligaron a que los llevara al lugar  donde se hospedaba Joaquín  llevándose a Ismael en calidad de rehén y detenido a la vez. 

Desde que Ismael salió para la Barranca de Otates, Joaquín se quedó vigilando el mesón pero de más lejos porque a Joaquín algo le latía acerca de  Polín, de pronto como que pensó que su amistad no era muy sincera para con él. Entonces  cuando llegaron Hermilo sus hermanos y otros elementos que los acompañaban al mesón, Joaquín los vio y se desapareció por las calles de Guadalajara. Sucedió que Hermilo de coraje que ya no encontró a Joaquín se llevaron a Ismael con rumbo para Teocuitatlan o más bien para Tuxcueca, la tierra de Fernando Basulto  Limón, y por allá lo mataron cobardemente y tiraron su cuerpo a la laguna. Desde ese día Hermilo por sugerencia de Fernando Basulto, exhorto  por la vía legal a Joaquín Cedano, un exhorto significaba que  cualquier Policía, Agente de las Defensas, un Militar o Presidente Municipal de cualquier pueblo donde quiera que lo vieran lo podían detener y encerrar para después juzgarlo, por el crimen que había cometido. Fernando empezó a odiar con más fuerza a Joaquin porque entonces todavía los Solórzano, los Sánchez, los Anguiano y los Castro eran amigos de Fernando; bueno dicen que Don Fernando, odiaba tanto a Joaquín que hasta le puso un sobre nombre, lo bautizó con el sobrenombre de: “Joaquín Cedano El Nixtamalero”. Después de lo ocurrido en Guadalajara, Joaquín en vez de irse para el Norte, como tenía planeado se regresó y se fue unos días a Sayulapan con su amigo leal Roque Gómez, y su otro amigo fiel el tal, “Robles”. Desde Sayulapan estuvo reorganizando otra vez su gavilla de valientes, y bandoleros. Sayulapan fue su centro de operaciones por unos días, fue allí desde donde mandó investigar el paradero de su compadre Ismael y le informaron  que Hermilo y sus policías lo habían matado, era claro que Joaquín no iba a dejar esa muerte sin vengar, Ismael era su compadre más querido y de alguna manera se sentía culpable por haberlo invitado a que se fueran juntos a Los estados Unidos.

El Relato:

Joaquín ya se había decidido acabar con los políticos (Los Solórzano) de Santa Clara, su  plan era el siguiente: primero matar a Polín, y a los otrosdespués los iba a ir matando poco a poco,   como se le fuera presentando la oportunidad. La gente no sabía que Joaquín andaba tan cercas de las Barrancas,algunos  se imaginaban que andaba por allí, pero nadie hacia ningún comentario. Un día de repente que lo ven  entrar a Santa Clara, con su pandilla  de 25 o 30 hombres, dicen quienes presenciaron esa entrada de bandoleros que se miraban muy imponentes todos venían muy bien armados parecía que aún seguía la revolución; traían buenos caballos, con buena silla de montar, cada uno traía  su soguilla y machete atados al fuste de la silla, todos con sus espuelas, sus  chicotas y sus chaparreras, traían  ropa más o menos presentable, buenos sombreros,  y de armas traían rifles, pistolas,y los famosos verduguillos con los que cortaban los “pescuezos” a sus enemigos, los castraban o les arrancaban  piel. Entre los mirones comenzaron los comentarios.

Una muchacha por allí dijo: … ¡se ven muy guapos y elegantes!

Un señor atinadamente dijo: “nos espera una racha de crímenes muy mala”

Otra señora que era más religiosa dijo:

“esto va a ser como un pasaje bíblico del Apocalipsis”.

 Por último el  filósofo exclamo:

 “LAS MUERTES YA ESTAN ANUNCIADAS” solo es cuestión de tiempo y espacio.

Sucedió que como Joaquín andaba por los cerros escondiéndose y a su casa solo venia de noche, se estaba un rato con su familia, mientras lo cuidaban sus compañeros, entonces el día que mató a Polín, andaba allá arriba por el cerro del Chiquihuitero, los Ailes cercas de  Lagunilla. De allí decidió venirse a Otates atravesó  por el Márquez,  Tierra Colorada, Pueblo Nuevo, pregunto por Pancho y le dijeron que andaba en El Cajón de visita con Antonio Ureña. Luego se pasó   a la casa del Sr. Antonio Ureña, a buscar a  (Pancho) Rodríguez. Siguieron su camino por el rio rumbo a Chancla, y más abajo también levantaron al Sr. Luciano Meza apodado “La Rana”, cuando llegaron a la casa del Sr. Polín Bonilla, que también era tienda  de abarrotes; casi todos  compañeros de Joaquín se quedaron afuera de la tienda cuidando a los tres hombres que traían detenidos solamente se bajaron de sus caballos; Joaquín, Roque Gómez, y Robles, Joaquín al entrar a la tienda le Pregunta a Doña Amparo:

Buenas noches Amparo ¿esta Polín?

¿Polín? …(dijo titubeando doña Amparo)

Si, nomás que esta malito…  ya se acostó les dijo Amparo,  (y agregó)

Pero si quieres  le hablo Joaquín.

Entonces le Contestó Roque Gómez

No te apures Amparo, ¡ahorita se va aliviar!

Para esto Doña Amparo se dirigió al cuarto que se comunicaba con la tienda y para prevenir que no fueran a tramar algo allá en el cuarto, los tres hombres se fueron siguiendo a Doña Amparo hasta la cama de Polín. Una vez dentro frente, a frente Joaquín le comenzó a decir: “Polín aquí traemos a Pancho Rodríguez y ya nos platicó   como estuvo todo”

Joaquín  le siguió reclamando a Polín que porque le había dicho a Hermilo donde se encontraba en Guadalajara, y le dijo también que por su culpa habían matado a su compadre Ismael, a lo que Polín le contestó que él nunca se imaginó que  lo irían a matar, y siguió diciendo… yo pensé que ni siquiera irían  a Guadalajara a buscarte, pero perdóname Joaquín. Joaquín le contestó:

 ¿Y la muerte de mi compadre Ismael quien la va a perdonar?

En vez de calmarse Joaquín, con lo que le dijo Polín lo hizo enojar más y le gritó ¡ahorita mismo te vas a morir! a eso vinimos a matarte a ti y a Pancho. Entonces entre los tres lo agarraron y prácticamente lo arrancaron de la cama y lo sacaron hasta la calle para juntarlo con Pancho, y “la rana” Luciano Meza; la intención era de matarlos a los tres. Cuando iban sacando a Polín, de su casa (el siguiente relato nos lo contó el sr. Eusebio Rubio De Barranca De Otates) dice que Doña amparo abogó por su esposo, les rogó, les suplicó, les imploró, les pidió que no se lo llevaran, que por favor no le hicieran daño que si era dinero lo que ellos querían, ella se los daba pero que le perdonaran la vida. A lo que Joaquín le contestó. No Amparo, cuando necesitaba dinero  no me lo prestó  Polín, lo único que conseguí fue que mataran a mi compadre Ismael y eso no se lo puedo perdonar. En frente de la casa de Polín vivía el Sr. Meregildo Frías,  sobrino de Polín, cuando empezaron los jaloneos, las discusiones los dimes y diretes  entre la trifulca Meregildo optó por defender a su tío aunque fuera de lejos porque Joaquín traía mucha gente. De repente al escuchar  los disparos que Joaquín y su gente no esperaban, todos se sacaron de honda y comenzaron a disparar para todas partes entre la obscuridad, sin saber a qué o a quién le estaban tirando. En esa confusión de intercambio de balazos el Sr. Luciano Meza, aprovechó  y se echó a correr, dicen que  después Luciano mismo platicaba lo que había pensado ese día que corrió: dijo que pensó;

 “si me salvo bueno si no Dios que me perdone de todas maneras ya meconsideraba hombre muerto”.

 Luciano se escapó y vivió muchos años más en la Barranca de Otates. Dice Eusebio que cuando Luciano salió corriendo como loco por la calle, Joaquín les grito  a sus hombres… ¡Que no se escapen Polín Y Pancho! Entonces todos al mismo tiempo se voltearon hacia donde estaban los dos (Polín y Pancho) y los mataron en un santiamén. Meregildo corrió y  se escondió para que no lo fueran a matar. Joaquín y su gente se fueron hasta la cueva de Ojo de Agua, mejor conocida como la cueva de Joaquín.

Aportación de Hector Arenas lasmusas9@yahoo.com